LA MÚSICA ENTRE DOS SIGLOS. LAS VANGUARDIAS.

 Músicos vinculados al IMPRESIONISMO

Claude DEBUSSY  y Maurice RAVEL.

Con frecuencia se aplica –demasiado alegremente-­­ el término impresionista a otras artes. En rigor, el Impresionismo tuvo un desarrollo cronológico muy específico y un carácter esencialmente pictórico. Aún así, podemos señalar que el Impresionismo impactó en la escultura –Rodin, Benlliure-­­, la literatura del cántabro Pereda en Peñas arriba o del valenciano luminista Blasco Ibáñez en Entre naranjos. 

Debussy y Ravel

Por lo que se refiere a la música se ha denominado al pintor y compositor francés Claude DEBUSSY (1862-1918) como impresionista, término que a él le encantaba. Su composición La mer de Debussy parece retrotraernos a las marinas de Monet. Una tarde en Granada también ha sido calificada como impresionista.

Junto con Claude Debussy, el archiconocido compositor y pianista Maurice RAVEL (1875-1937) fue la figura más influyente en la música francesa de su época y el principal representante de la corriente del Impresionismo a inicios del siglo XX. Su producción musical, no muy numerosa, es fruto de la confluencia de complejos influjos que proceden de: Couperin, Rameau, el ritmo del jazz y la música y el folklore español. Destacan entre sus composiciones:  Dafne y Chloé (1909-­­12) y Bolero (1928).

Compositores españoles entre dos siglos: FALLA, ALBÉNIZ, GRANADOS y BACARISSE.

ISAAC ALBÉNIZ 

Isaac Albéniz

En cuanto a la música española y el Impresionismo, el pianista y compositor catalán Isaac Albéniz (1860-1909) , ha sido considerado como luminista. Su estilo más característico comenzó a perfilarse con las primeras obras importantes de carácter nacionalista escritas a partir de 1885, en especial con la Suite española de 1886. Su ideal de crear una «música nacional de acento universal» alcanzó en la suite para piano Iberia, su obra maestra, su más acabada expresión. Admirada por músicos como Debussy, la influencia de esta partitura sobre otros compositores nacionalistas españoles, entre ellos Manuel de Falla y Enrique Granados, fue decisiva. Ella sola basta para otorgar a Albéniz un lugar de privilegio en la música española. Cosmopolita y viajero, sus composiciones más célebres son un reflejo de su pasión por España: Suite Española, Recuerdos de Viaje, Cantos de España, Navarra, Danzas Españolas, Suite Azulejos, Rapsodia Española para piano y orquesta. Sus composiciones son de un virtuosismo tan complejo que presentan grandes retos al intérprete, reuniendo múltiples dificultades técnicas y exigencias sonoras. Él mismo consideraba "inejecutables" algunas de sus páginas de la Suite Iberia.

ENRIQUE GRANADOS

Enrique Granados

El catalán Enrique GRANADOS (1867‐1916) fue denominado con justeza el “ultimo romántico”. Gran pianista y músico, sus obras basculan entre el españolismo de sus composiciones – como se aprecia en su famosa composición Goyescas o en Danzas españolas -­­ con su romanticismo lleno de lirismo de sus Valses poéticos. Destacó, además en su faceta de gran concertista de piano por los mejores teatros europeos e incluso de Estados Unidos. Interpretaba preferentemente a los grandes compositores románticos como Schumann, Chopin o Liszt. Amigo del pintor Néstor –que le hizo un impresionante retrato que se conserva en su museo de Las Palmas de Gran Canaria-­­ murió trágicamente. Su muerte –junto con su esposa-­­ ocurrió cuando el barco inglés en el que viajaban camino de España, después de haber dado un concierto en Nueva York, fue atacado por un submarino alemán en plena I Guerra Mundial.

MANUEL DE FALLA

Manuel de Falla

El gaditano Manuel de FALLA (1876-­­1946) junto con Albéniz y Granados, configura la tríada de compositores cosmopolitas españoles más relevantes entre dos siglos: el XIX y XX. Los tres aunaron su pasión por la música española y europea. En el caso de Falla, a su gran interés por el flamenco se une la influencia de la música francesa recibida en París de autores como Fauré, Dukas o Debussy. Entre sus composiciones musicales descuella Noches en los jardines de España y las óperas y operetas La vida breve o el retablo de Maese Pedro. También cabe destacar que elaborase música para danza de clara inspiración española como los célebres ElAmor Brujo y El Sombrero de tres picos. Grandes artistas de la época, desde Néstor hasta Picasso realizaron escenografías y vestuario para los ballets citados. 

SALVADOR BACARISSE

Salvador Bacarisse

Salvador BACARISSE (1898-­­1963) fue compositor y crítico musical. Vivió en París. Aunque se le considera un músico vanguardista, sus influencias eran muy variadas como el Romanticismo, Impresionismo, el Modernismo… Sus composiciones principales, entre muchas otras, son:el ballet Corrida de feria; la ópera Charlot y la romanza Concertino para Guitarra y Orquesta en La menor, Op. 72. Escribió además, numerosas canciones sobre textos de Juan Ramón Jiménez, Alberti y Cernuda, etc. 

La música ESPIRITUAL NEGRA, el BLUES y el nacimiento del JAZZ 

La MÚSICA ESPIRITUAL NEGRA es una tipología de canto colectivo cristiano que surgió a fines del siglo XVIII y se difundió a inicios del siglo XIX en Estados Unidos. Sus orígenes son ancestrales vinculados a la esclavitud de trabajadores afroamericanos. Estas composiciones musicales se cantaban en las iglesias protestantes estadounidenses: el predicador cantaba un verso y la congregación lo repetía después. En general, predominan los ritmos muy dinámicos y alegres, aunque también los hay más tristes y melancólicos. A partir de 1871 surgió un grupo en la Universidad de Fisk de Nashville (Tennessee) que popularizaron muchísimo este tipo de música, llegando a grabar su primer disco en 1913. La música góspel, heredera de la “música espiritual negra” paulatinamente la sustituirá a lo largo del siglo XX, y en la actualidad son muy populares en todo Estados Unidos: las míticas Oh Happy Day, Oh Freedom, Amazing Grace, When the Saints Go Marching in, Swing low, sweet chariot… Forman parte del acervo musical de la música americana, además ha sido reinterpretada por todo tipo de músicos y cantantes desde Johnny Cash a Janis Joplin.

El BLUES es un género musical vocal e instrumental, basado en la utilización de notas repetitivas que suele seguir una estructura de doce compases. Uno de los significados de la palabra blue en inglés es triste o melancólico, de ahí que este tipo de música destile una cierta melancolía o tristeza. Originario de las comunidades afroamericanas de Estados Unidos, es heredero por tanto, de la música espiritual negra. Presenta también influencias de la música inglesa, escocesa e irlandesa. El blues influyó en la música popular estadounidense y occidental en general, llegando a formar parte de géneros musicales como el ragtime, jazz, bluegrass, rhythm and blues, rock and roll, funk, heavy metal, hip-­­hop, música country y canciones pop. 

Sobre el nacimiento del Jazz hay varias hipótesis. La principal, según algunos expertos, es que surgió en Nueva Orleans (río Mississipi), para otros, nació simultáneamente en distintos enclaves de Estados Unidos vinculado a la música espiritual negra, la antigua música folklórica americana, la música de las bandas callejeras, canciones y danzas de esclavos de origen africano, etc. Se nutre también de la música europea. No existe una fecha exacta del comienzo del jazz como género musical propiamente dicho. Se suele datar entre los años 1895 y 1917, fecha en la que el término jazz se generalizó y en el que la Original Dixieland Jazz Band realizó sus primeras grabaciones. Para el surgimiento del jazz fue vital que, tras la emancipación de los esclavos, muchos se asentaron en Nueva Orleans y comenzaron a tocar, sin formación musical académica, los blues y los spirituals. Era frecuente que competitivas bandas de la ciudad tocaran melodías rápidas en los entierros como Didn’t He Ramble o When the Saints Go Marching In. Muchos futuros músicos de jazz tocaron en ellas. Hacia los años 20 el Jazz comenzó a unificarse, a tener un enorme éxito en los clubs de música de Chicago, Nueva York, Los Ángeles, Kansas City. Por aquel entonces, los discos de la Original Dixieland Jazz Band comenzaron a difundirse. Por último, recordemos que al Art Déco, que estudiaremos próximamente, se le denominó estilo Jazz, porque coincide con su etapa de máximo esplendor que será los años 20 y 30 del siglo XX.